Libros: El universo de las lovemarks

Lovemarks: el futuro más allá de las marcas. Un libro de 2005 pero que nunca pasará de moda. ¿Cuentas? ¿Números? No son las estadísticas lo que hace que ganen las marcas. 

Ha llegado a mis manos un libro emocionante. El mundo empresarial no es uno de mis mayores intereses, pero sí la psicología que se encuentra detrás de las cosas que amamos y, entre ellas, siempre están las marcas. Seguro que puedes decir, casi sin pensar, dos o tres marcas que amas y que supone un disgusto saber que mañana desaparecen.

El autor es Kevin Roberts, de Saatchi & Saatchi, quien se dedica a contarnos una historia a lo largo de todo el libro. Su historia. La trayectoria profesional, siempre cerca de la publicidad y el marketing, le ha ayudado a comprender que el mercado domina todo y que escuchar a los consumidores es clave para conseguir el amor de la gente.

¿Por qué elegimos Nike o Starbucks a pesar de su precio?

Este libro no merece un resumen en una entrada de blog. Hay que profundizar y bucear en sus páginas. No es para leer del tirón. Los conceptos son complejos y hay que ir asimilándolos poco a poco. No por su dificultad, sino por la complejidad que entrañan los comportamientos humanos. ¿Por qué pago un café en Starbucks a pesar de su coste? ¿Por qué mis zapatillas son Nike? ¿Por qué elijo una marca de leche y no otra, si hay muchas para elegir en el mismo estante?

“Conforme se incrementan las opciones de elección en las compras, la lealtad a las marcas que no les afectaba de un modo personal se tambaleaba”.

Kevin Roberts ha llegado a la conclusión que la imagen de las marcas no la elige sus creadores, sino el consumidor, los clientes. Por eso hay que cuidarlo pero, sobre todo, entenderlo.

Los nuevos consumidores somos diferentes. Estamos mejor informados, somos más críticos, somos menos leales y somos más difícil de entender. ¿Cuál es el camino para llegar hasta nosotros? Las marcas buscan nuevas conexiones emocionales, cosas en las que podamos creer y por tanto podamos amar.

La diferencia, en este caso, entre razón y emoción es clave para entender nuestra relación con nuestras propias lovemarks. La razón nos ayuda a elaborar conclusiones, pero la emoción es la clave para que tomemos las decisiones. Si las dos entran en conflicto (este vestido es demasiado caro pero me gusta mucho) siempre gana la emoción.

En uno de los capítulos dedicados al amor y al respeto, encontré una frase que me encanta:

“Las cosas con las que hemos decidido convivir no son objetos inertes. Las envolvemos con nuestra imaginación. Nos expresamos a través de ellas. Las convertimos en parte de lo que nos importa”

Tanto si vienes del mundo de la empresa como si no, este libro te va a encantar. Toda la psicología que está detrás de las marcas que amamos nos ayuda a comprenderlas, pero también nos ayuda a conocernos a nosotros mismos.