¿Sabemos distinguir lo bueno?

| The Blues Brothers – Riot in Cell Block Number Nine

He aquí una buena foto. Y si quieren una buena frase, lean las primeras líneas de la Biblia.

El hombre no sabe que unos años más tarde (estamos en el Nueva York de 1937) todo el mundo llevaría una máquina de fotografiar en el bolsillo. En aquel momento, una instantánea (así se llamaban) era algo excepcional, como una frase en los primeros tiempos del lenguaje.

Morris Engel. Harlem merchant
Morris Engel. Harlem merchant

[…] El hombre ha abierto el ventanuco de su negocio, por llamarlo de algún modo, y se ha enfrentado al objetivo del fotógrafo con la seriedad que implicaba en aquella época dejarse fotografiar, que era algo así como dejarse escribir. Es posible que se acabe de abrochar el botón superior de la camisa, por decoro. Luego ha cerrado la boca, de la que quizá falte algún diente, y ha dicho para sus adentros: “Hágase la luz”.

Como siempre, Juan José Millás nos deja en su sección La Imagen de El País Semanal unas fantásticas letras. Esta vez, sobre la inocencia perdida hoy, rodeados de imágenes y palabras. Merece la pena un clic en el texto.

Ah, por cierto, ahí van esas primeras líneas: En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.